15 de febrero de 2006


Caminando por la calle distraídamente
pude observar cada uno de los vértices
que sostienen el mundo.
Admirar cada uno de esos diminutos y escuálidos elementos
que mantienen a flote todos aquellos náufragos
que comparten el anodino barco
que navega hacia el mar de la vida.
Caminando por la calle distraidamente
hoy pude entender que esos detalles tan ignorados
son precisamente los pilares
que contrarrestan los empujes de mi ambición,
los que dibujan el sendero con matices y carteles guías,
los que prenden la ilusión y los logros,
los que alimentan cada instante a mi inquieta alma
y nutren con paz a mi rasgado corazón.
- Noelia -

No hay comentarios: