Como en un poema nocturno
En el que la noche es la protagonista,
Empezaré a contarte qué es lo que mis ojos ven
En el cielo estrellado situado a mis espaldas.

Veo mundo, veo vida, veo placer…
Veo prisas, veo humildad, veo agonía…
Veo todo aquello que tú no logras ver,
Aquello para lo que tu alma no está preparada.
Veo una luna que gobierna
Toda una corte de vasallos dispuestos a servir a su reina.

Veo un palacio, veo una luz, veo inocencia…
Veo inquietud.
Y es que en tus ojos, vida mía,
No puedo observar de forma directa ese gran reino,
Pues tus lágrimas siguen empañando el espejo
Donde la imaginación y lo placentero
Coquetean cada noche antes de amarse mutuamente…

- Noelia -